lunes, agosto 22, 2005

A despertar de la indiferencia

Andrés Caicedo decía que “uno debe morir cuando pierde la capacidad de maravillarse”, seguramente parafraseando a Albert Einstein. Posiblemente el escritor caleño, a sus 25 años, se encontró sumido en la indiferencia y por eso, el 4 de marzo de 1977, decidió suicidarse, recordando esa frase que a menudo pronunciaba ante sus compañeros y maestros en el colegio San Luis de Cali.
La indiferencia frente a los hechos que nos rodean puede ser un síntoma claro de perder la facultad de maravillarse. En la guerra civil de El Salvador, los niños perdieron su capacidad de aterrarse ante los cadáveres que aparecían en las puertas de sus casas o en las calles de sus pueblos o barrios. Poco a poco, esos muertos se convirtieron en algo tan cotidiano que lo máximo a lo que se aspiraba era que ese cadáver generara algo de curiosidad.
No muy lejos de El Salvador, en un país llamado Colombia, todos nos hemos acostumbrado a convivir pasivamente ante la muerte, la corrupción, la traición y la deslealtad. No de otra manera se puede entender el silencio y la quietud de la sociedad frente a hechos tan aterradores como el secuestro y el homicidio.
Cuando Antanas Mockus, como Alcalde, convocó a una marcha para rechazar las acciones terroristas que amenazaban a Bogotá, solo un puñado de ciudadanos participaron activamente. En ese momento, muy pocos lograron comprender la dimensión del acto terrorista que inspiró esa marcha. Hace 3 años, las Farc dinamitaron una válvula en Chingaza, aunque la intención era destruir un muro de la represa, lo que hubiera dejado a Bogotá sin agua por varias semanas. “Asimismo puso en inminente peligro de muerte a miles de personas de la vertiente de los Llanos Orientales, ya que el atentado pudo haber generado una inundación de efectos catastróficos. Técnicamente, el “vaciado rápido” de una represa como la de Chingaza hubiera provocado una avalancha de proporciones gigantescas que habría destruido parte de la ciudad de Villavicencio, capital del departamento del Meta”.
Pero ni la sed, ni el intento de cometer semejante masacre pudieron conmover a los bogotanos. Tampoco el país elevó su voz de protesta: la capacidad de los colombianos de aterrarse perdió la prueba y demostró que, o está dormida, o finalmente murió sepultada por la avalancha de situaciones negativas que ocurren en nuestro país.
Un ejemplo claro de resistencia civil lo dio la sociedad española cuando se levantó contra la ETA. El 12 de junio de 1997, la agrupación terrorista secuestró y asesinó al concejal Miguel Ángel Blanco. Los etarras pretendían la liberación de varios de sus activistas detenidos a cambio de liberar al secuestrado. Vencido el plazo, el cadáver de Blanco apareció junto a un árbol. A las pocas horas las calles de las principales ciudades ibéricas estaban colmadas de manifestantes que tildaban de asesinos a los miembros de ETA y a los de la agrupación política HB. Al finalizar la tarde, las instalaciones del brazo político de ETA, el movimiento Herri Batasuna, fueron militarizadas para impedir que los manifestantes destruyeran por completo las sedes políticas.
La indiferencia ha permitido que los terroristas y los violentos asesinen, por ejemplo, a 117 personas en la iglesia de Bojayá; o que dos aviones transporten a paramilitares hasta la población de Mapiripán, en el Meta, y ultimen, a sangre fría, a más de 40 personas.
De igual forma, esta indiferencia ha sido terreno fértil para que asesinen a personas de gran valía, como Guillermo Cano, Luis Carlos Galán, Álvaro Gómez, Fernando Landazábal y miles de colombianos cuya sangre se ha derramado por las calles y campos de esta tierra.
Sorprende semejante adormecimiento, pues guardamos un silencio cómplice frente a los robos y desfalcos como Dragacol, Colpuertos y los terrenos del Guavio entre muchos actos de corrupción que ya parecen normales.
Lo cierto es que la indiferencia colombiana parece cada vez más un suicidio social y colectivo, producto del adormecimiento de nuestra capacidad de maravillarnos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

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Dibolledo dijo...
Muy cierto, yo mismo me hago esa pregunta acerca de la indiferencia que tenemos los colombianos, y me pregunto si será falta de identidad, lo cual nos desarraiga de cualquier compromiso con nuestros compatriotas, o será egoísmo, miedo o desconfianza o todas las anteriores.

Puede existir un poco de todas creo, y esta fatal combinación genera esa despreocupación sobre cualquier cosa que suceda, así sea con el vecino de al lado.
Me atrevo a lanzar una hipótesis y el primer punto es la identidad y cabria la pregunta que es ser colombiano o que caracteriza al colombiano, que cosas no unen, que no sea el fútbol, Shakira o Montoya… Porque esta visto que cosas como los desplazamientos o la amenaza de Chingaza de la que nos habla atrabilioso no nos movió ni nos mueve un pelo…
También tenemos desconfianza en los “entes reguladores”, en la mayoría de los casos no se hacen denuncios ante las autoridades ya que como se dice popularmente: “eso pa´ que, si eso no hacen nada”, o directamente se le teme a la policía o existe aun mayor desconfianza en las entidades oficiales (sin ser infundada esa desconfianza). Pasamos a la pregunta que se hacia en el Chapulin Colorado: y ahora quien podrá defendernos… Frente a amenazas como la guerrilla, paramilitares, delincuencia común, sicariato, mercenarios y cuanta organización que se toma la ley por su cuenta…
En resumen el nivel de corrupción en Colombia es tan grande, que se desconfía hasta de la honestidad, lo cual nos lleva a un grado de indiferencia muy parecido a la depresión, pero en escalas sociales; casi como un: “sálvese quien pueda y a volar pastores que se acabo la navidad”… Necesitamos urgentemente un proceso de re-educación…

agosto 22, 2005 1:54 AM


jUAN dAVID dijo...
buen articulo.
para explicar lo que pasa en Colombia, esa llamada indiferencia ante la muerte, ante la violencia, la inseguridad y otros, yo no la explico tanto sobre el hecho del colombiano en si, sino del ser humano en general. Y digo del ser humano por que este tiene la facultad de adaptarse a las mas variadas condiciones, ya sean sociales como en este caso o climaticas, o ambientales. como se ha visto a lo largo de la historia del ser humano que siempre se a adaptado a las condiciones en que vive y al medio que lo rodea o lo ha adaptado a su convenencia, si no lo hace desaparece, mejor dicho se adapata o se adapta . Es como en Irak al principio uno seguia la noticias sobre los atentados ahora es algo que lamentablemente se volvio corriente y diera la imprecion que nos volvimos indiferentes a estos hechos, y eso es lo que pasa en todo el mundo que ya lamentablemente se acostumbraron a lo que sucede en este pais. Lo que pasa en Colombia yo pienso es que la banalizacion de estos hechos llevo la sociedad a crear una coraza que la hace menos vulnerable, causada por la costumbre simplemente, que es algo tan sencillo que muchos se niegan a aceptarlo y buscan otras explicaciones que no digo que no las hay, pero la costumbre simplemente responde a esa aparente insensibilidad. miren las diferentes condiciones sociales en las que viven otros pueblos y que nos parecen dificiles y en algunos casos inaceptables como las condiciones sociales que se ven en otros paises de africa y asia donde encontrariamos la misma "indifrencia" de la que habla el articulo y tambien la fuerza de los pueblos para soportar y adaptarse a sus realidades. si los paises del primer mundo miran escandalizados lo que nos pasa o lo que aveces les sucede como en España es por que no estan acostumbrados a esos grados de violencia pero si usted los mete en esas condiciones durante años van a desarrollar por una parte las mismas fuerzas, que es a lo que llamo la coraza que desarrolla el ser humano en esas condiciones que lo protege sin ir a decir que lo vuelve invulnerable y que lo ayuda a seguir adelante a pesar de las dificultades, a dejar esas cosas a un lado y no dejarse llevar por ellas. coja una ciudad A con altos indices de inseguridad y de violencia, coloque dos personas una que viva en una region muy calmada con muy poca violencia e inseguridad y otra que por el contrario viva en cociciones similares que la ciudad A, donde deben permanecer durante años, ya veran que la que esta costumbrada a estos echos los podra soportar mas facilmente por que ya esta "vacunada" y no es por que no le importe simplemente sin darse cuenta se a adaptado, la otra o se adapta o simplemente va vivir en un grado de stress tal que no podra soportar las condiciones del medio donde llego, como dije o se adapta o se adapta, si no su vida se va a volver imposible. Y mire lo que pasa en Colombia mire la poblacion que vive alli, a pesar de las condiciones dificiles siguen su vida y no es que se vuelvan insensibles o que no les importe simplemente se adaptan y la adaptacion se logra con la costumbre, todos tenemos esa coraza de la cual nos escandalizamos y nos preguntamos si nos estamos volviendo inhumanos y no lo es, simplemente eso demuestra que somos humanos y que esos son los mecanismos que desarrollamos inconcientemente para defendernos, para soportar y no enloquecernos. Finalmente no es indiferencia, aunque pareciera, no es indolencia, por que si nos duele todo lo que pasa en nuestro pais y hechos como los atentados que nombra el articulo no podemos decir que no nos duelan y que seamos indiferentes a ellos y a todo lo que sucede en el pais, da la imprecion que asi fuera pero no lo es. Estoy deacuerdo que se deberia protestar mas fuertemente pero por el hecho de que no salga todo el pais a la calle a protestar no prueba como lo dicen que seamos indiferentes y que no nos importa, por que si nos importa a la mayoria de los colombianos.Simplemente creamos los mecanismos que hubiera creado cualquier ser humano ante esta realidad, y que repito no es como pensamos,ni in diferencia, ni indolencia,ni egoismo.

jUAN dAVID

agosto 22, 2005 7:23 AM


Atrabilioso dijo...
NOTA DE LA DIRECCIÓN A DIBOLLEDO:
Acabo de llegar del colegio de mi hija: resulta que un compañero decidió golpearla y la situación ocurrió varias veces. Entonces, acudimos al colegio para solucionar el asunto. En la reunión de hoy los padres del niño estaban sorprendidos porque su hijo era "incapaz" de cometer esos abusos. Pues bien, a nuestras denuncias salieron otras tantas de los niños, porque los padres de los otros compañeros creen que es un problema denunciar y hacerle seguimiento a una situación hasta que se mejora. Imagínese, si la indiferencia ronda a los padres sobre los hijos, ¿qué podemos esperar de esos niños en cuanto a la deferencia y preocupación por los demás, por su país y por la sociedad?
Mi experiencia en cuanto a la denuncia es positiva: siempre encuentro respuesta en las autoridades y en los entes, públicos y privados, ante los que instauro mi queja. Claro, muchas veces hay que seguir un viejo principio: "NUNCA TE RINDAS" y creo que una de las causas para la indiferencia es la inconstancia de los colombianos para buscar la reinvindicación frente a un hecho que los afectó.
Gracias por sus comentarios.

agosto 22, 2005 9:41 AM


Atrabilioso dijo...
NOTA DE LA DIRECCIÓN A JUAN DAVID:
Interesante su análisis y muestra otro aspeto sumamente importante: el dormir la sensibilidad como mecanismo de defensa. Sobre eso, yo creo que efectivamente hay una indolencia que se origina, entre otras causas, en la saturación de violencia como mecanismo de defensa para sobrevivir en un ambiente hostil: entonces, desde mi perspectiva, esa indolencia existe, pero tiene raices profundas y explicaciones que es necesario analizar para superar dicha indiferencia.
En cuanto a España, ellos han vivido la violencia de ETA durante décadas y la respuesta como sociedad ha sido ejemplar: esto significa que NO HAN permitido que la sensibilidad se duerma o que la nación entre en un mecanismo de defensa indolente.
Lo cierto, y coincidimos, es que se hace urgente recuperar esa capacidad de maravillarnos: lo que ocurre es que no veo esa capacidad solo como ver las cosas bonitas, sino también tener la facultad de sorprendernos por las situaciones negativas y nefastas que ocurren a nuestro alrededor.
Gracias por sus comentarios.

agosto 22, 2005 9:49 AM


maria teresa dijo...
Me parece que en estas situaciones y el comportamiento desplegado juega su parte la adaptacion, pero la adaptacion es en si lo que genera 'la cultura' que uno atribuye a comportamiento y mentalidad de grupos, como aquellos para los que es muy deseable el que sus hijos se formen para quitarse la vida y quitarle la de muchos inocentes, que para ellos es ganar el cielo con eso o ganar poder y gloria sobre otros.

Un concepto que va contra la misma vida, pero que ademas se atribuyen el derecho sobre las de otros. Ejemplo el caso chingaza que Atrabilioso nos recuerda, o Bojaya, o los retenes milagrosos, o el derecho de atracarlo sin que el transeunte le de una paliza al criminal que oso tomar lo ajeno y que puede incluir la vida ajena!

Esas manifestaciones de 'adaptabilidad' se notan en el vocabulario, como el caso de los niños (en El Salvador se dio y ademas creo que se hicieron unos programas para contrarrestarlo), y eso lo encontramos en el lexico entre colombianos, en su vision del futuro (no la hay en mayoria de los jovenes), en la forma de vivir el instante, y francamente espeluznante esa vision, que me hace alejarme de quien la exprese, pues mi concepto difiere drasticamente de ese, respeto la decision de quitarse la vida un adulto, pero si puedo convencerlo de lo contrario lo hago, y no apoyo ni ignoro a quien le quite la de otro.

En eso tal vez entra en juego el aislacionismo ejercido a eso grupos con dicha mentalidad, lo que genera perfeccion en esa adaptacion, pero que en contexto de interaccion internacional o entre regiones diferentes genera guerras.

Lo extraño tambien es la actitud festiva con estos 'suicidas' ejercen su vida y expresan friamente su 'superior mentalidad'. Y la coronan con laureles de intelectualidad mientras descaradamente tildan de 'simplistas' a aquellos que diferemos de sus criminales conceptos: ya eso es adaptacion extrema para el mal.

El asunto deberia ser que para convivir hay que fijar intereses comunes e intereses individuales, y normas que permitan el lograr ambos. Pero para que se den las normas se necesitan organizadores y organizados que las cumplan: ley orden y una poblacion respetuosa y cumplidora.

El resto es excusa y abusos. Todo esto es sentido comun y ningun doctorado se necesita para entenderlo, y solo tiene que observarlo en la misma naturaleza que nos rodea, de la que el ser mas con mas capacidad cerebral la embarra a cada segundo.

Tema importante.

agosto 22, 2005 9:58 AM


El usuario anónimo dijo...
Sera que la indiferencia nos ha llevado a la indolencia y poco a poco nos hemos sumido en la deshumanizacion egoista de la sociedad ?.

Cada dia se mestra mas la tendencia a un individualismo malicioso y excluyente,lo percibimos quienes vivimos fuera y viajamos de cuando en cuando, es preocupante,las grandes ciudades antes acogedoras y abiertas se han parcelado en pequeñas aldeas,proyectos habitacionales cerrados y estrechamente vigilados,crean en quienes los habitan un falso sentido de seguridad, les han estrechado horizontes y de paso creado la idea de elitismo ,muchas veces discriminativo en contra de quienes habitan proyectos de menor prestancia.

A este fenomeno agregamos esa division de la poblacion en "estratos",parecido mas bien a distintincion por "castas" de la India ,como se parecen los pertenecientes al "estrato 6" a los intocables, que convierten en impuro todo lo que tocan, que tal si nos percatamos que por debajo de ese ultimo escalon de estrato existen aun otros inferiores donde lastimosamente sobreviven miles de colombianos,en perfecto abandono y vergonzosa miseria.

Colombia en conjunto muestra esa decision a desarrollarse, toca "humanizarnos" para lograr que este sea armonico y comprometa hasta el mas humilde colombiano.


Simpliciano

agosto 22, 2005 10:23 AM


Atrabilioso dijo...
NOTA DE LA DIRECCIÓN A MARY T:
Usted toca temas bien interesantes: el caso de aquellos que, por sobreadaptación, deciden aplaudir todas las fechorías y se escudan detrás de un cartón para gritar los vivas. Lo que ocurre, mi estimada Mary T, es que el sentido común es el menos común de los sentidos. Si a eso le sumamos la pereza intelectual de muchos, pues tenemos que la mediocridad cultural y la carencia de sensatez encuentran un excelente refugio en la indolencia y por ningún motivo les interesa moverse ni impulsar a nadie a salir de ese estado: es que para esos aparentadores, su zona segura se encuentra en la indolencia y en su incapacidad, practicamente innata, para maravillarse.
Gracias por sus comentarios.

agosto 22, 2005 10:23 AM


Atrabilioso dijo...
NOTA DE LA DIRECCIÓN A SIMPLICIANO:
Efectivamente el proceso de exclusión y de individualismo, desde mi óptica común y no desde un análisis sociológico que no tengo la autoridad ni los conocimientos para desarrollar, se presenta así: a mayor estrato, mayor individualismo. Fíjese que usted, por ejemplo, va a un conjunto de El Tunal y encuentra una comunidad cohesionada, con propósitos comunes, con luchas grupales por conseguir el bienestar. Pero al subir el estrato, hablemos del 6, generalmente un vecino no conoce al otro y las reuniones de propietarios son verdaderas luchas por alcanzar el poder.
Lo que veo es que lo que usted denuncia debemos analizarlo con mayor detenimiento, porque lo que en este momento intentamos es hacer un llamado a cada lector sobre la importancia de no perder la capacidad de maravillarnos, ni como individuos ni como sociedad y si la indolencia se apoderó de nosotros, despertar la sensibilidad como primer paso para construir país.
Gracias por sus comentarios.

agosto 22, 2005 10:30 AM


Gmar dijo...
Tal vez no sea indiferencia sino miedo a represalias de los grupos violentos.
Si miramos a nuestro alrededor, vemos que las personas se quejan del terrorismo en sitios donde no corran peligro como en reuniones de amigos, foros, correo electrónico, en las urnas eligiendo a presidentes antiterroristas, etc., pero sí temen exponerse a salir a la calle a protestar porque conocen bien a los terroristas y saben que son capaces de lanzar una granada a la multitud que protesta, mientras que los españoles saben que la ETA no haría eso a menos que entre la multitud haya un objetivo.
Con todo lo terroristas y asesinos que sean la ETA , no es comparable con la saña que demuestran los grupos colombianos, especialmente las Farc que asesina a una adolescente sólo porque saludó a un policía, como en realidad ha ocurrido.

Hace falta un líder que canalice el descontento y convoque a una protesta nacional, pero eso no está dentro de los intereses de nuestros líderes más interesados en cargos públicos que le generen dinero o poder. Y liderar una protesta no produce ganancias.

Internet seria un medio ideal para convocar. Abrir una pagina Web o un blog, y darla a conocer por los diferentes medios, en foros, correos electrónicos, cada persona enviando 20 mensajes y quienes lo reciban reenviándolo a sus contactos lograría una convocatoria nacional estableciendo una misma fecha y hora para todas las ciudades de Colombia. ¿O sería esperar demasiado de mi querido país?

agosto 22, 2005 12:55 PM


Jaime Ruiz dijo...
Buenas tardes, con perdón de todos los participantes tengo que volver a la discusión sobre el antiamericanismo, aprovechando que se habla de El Salvador. Sergio Méndez dijo que en la guerra civil de ese país hubo un millón de muertos, un "genocidio" del que se hizo cómplice el gobierno de Reagan... Bueno: consulté la enciclopedia y salen 75.000 muertos en la guerra civil, y pueden estar seguros de que la mayoría de esos muertos cayeron a manos de las guerrillas castristas, como reconoce Joaquín Villalobos. Hubo otra cantidad considerable de muertos a manos de los escuadrones de la muerte, que eran una reacción criminal y ligada al Estado que sin remedio se da cuando en el otro lado hay bandas de asesinos obrando con los mismos métodos. Es que la estrategia de esta gente consiste en exigir a las instituciones que sean perfectas mientras sus empleados tienen licencia para matar otorgada por la Historia. De esos 75.000 muertos muy pocos son atribuibles al gobierno de Duarte, que dirigió al país durante la mayor parte de esos años con apoyo norteamericano, siendo que los escuadrones de la muerte estaban ligados a otro partido, ARENA que no contaba con apoyo estadounidense. La guerra terminó cuando llegó a dirigir ARENA y a conseguir amplio respaldo popular el presidente Cristiani, un empresario que no estaba pensando en grandes frases para mandar a la gente a matarse sino en posibilidades de mejorar la situación. Si El Salvador no fuera un país minúsculo, Cristiani sería un mito continental
Es decir, primero empiezan la guerra porque reciben recursos y armas del exterior y porque controlan una parcela del Estado, aunque sea sólo una universidad donde forman a sus cuadros. Después atribuyen a sus víctimas todos los crímenes que cometen, después los multiplican por 13 (en este caso) y no vacilan en presentarse como las víctimas. Lo mismo se podría decir de los 1.500-2.000 militantes comunistas que mandaron matar los Castaño: en ese tiempo los niños de la tropa comunista tal vez mataron al doble o al triple de personas, y de personas completamente inocentes, pero una mentira que se repite mil veces se convierte en una verdad, como les enseñó Goebbels. ¿O es que no han oído ustedes hablar de los 300.000 muertos de la violencia, todos atribuidos a los partidos distintos al comunista, siendo que éste era el que tenía guerrillas organizadas desde antes de 1948 y un proyecto de Guerra Popular Prolongada. No tienen el menor rubor en matar gente y después cobrar el seguro.
Respecto al tema de hoy. Los que leían Colombia Analítica ya conocerán un viejo escrito mío sobre el tema, que creo que sigue siendo válido en algunos aspectos (claro, lo escribí yo, jaja).
Mirando las causas de esa indolencia: 1. Nuestro origen rural. 2. El predominio de población joven. 3. Exclusión social. Lo primero es muy llamativo, porque casi todo el mundo en Colombia tiene abuelos campesinos. Es muy curioso que las palabras que significan "civilización" remitan siempre a la ciudad: "civismo", "urbanidad"... La gente en el campo vive aislada y desconfía de los desconocidos, al tiempo que ve el gobierno como una cosa lejana y más bien odiosa. Por varias generaciones los descendientes de campesinos mantienen esos recelos. Lo segundo es más interesante: la juventud ya es un rasgo del país, pero por el baby boom de la segunda mitad del siglo XX es muy probable que la mitad de los habitantes del país tenga menos de 25 años, proporción que no se puede comparar con los países desarrollados. El joven está más atento a las expectativas de placer que al cumplimiento de objetivos morales, y un poco eso se manifiesta en el país que vive de rumba mientras se derrumba. Y lo tercero es más claro: con la gente humilde nadie cuenta, sólo para votar, para protestar contra el gobierno (y destruir lo que se pueda y si hay ocasión hasta saquear alguna tienda) y para que ejecute las tareas serviles.
Lo anterior lo decía refiriéndome a la falta de civismo en general. Respecto a ese civismo politizado hay otras dos cosas que conviene tener en cuenta, que es que la gente tiene miedo de meterse en la pelotera porque puede estallar una bomba y matarlos o mutilarlos. Ése es un problema universal porque ya pasó con Pablo Escobar, que la gente se oponía a la extradición porque en el terreno personal la bomba era peor. Pero hay otro elemento importante, y es que una parte de la sociedad estaba y está con las FARC, y esa parte de la sociedad domina los mensajes que circulan entre la gente, como cuando todo el mundo decía que los militares no querían acabar con la guerra, la gente no se ponía a pensar mucho y siempre estaba el maestro, el intelectual, el estudiante, el doctor de un lado y otro que le ofrecía las respuestas.
Para mí, y ya sé que me pongo "intenso" pero no veo alternativa, lo más importante es hacer frente a ESA indolencia, a no plantarse frente a los partidarios de las FARC y exigirles cordura y rectitud.

agosto 22, 2005 1:30 PM


Realista dijo...
Es esa indiferencia lo que mas me duele de la gente de mi pais y por ello siempre digo que nosotros mismos somos los culpables de lo que pasa en Colombia!. Pero como hacer para despertar a 40' millones de Colombianos?, como hacerles entender que solo nosotros mismos podemos cambiar la situacion!, no podemos esperar que los paises ricos vengan y nos apliquen la inyeccion de la solucion!. Esta solo esta en cada uno de nosotros.

agosto 22, 2005 1:54 PM


jUAN dAVID dijo...
definitivamente el problema es de movilizacion cuando sera que lo haremos, faltan personas que logren reunuir masas, quitarle el miedo a la gente de decir lo que piensa, de protestar, y sobre todo que movilizarse sirve de algo por que si la gente no responde o no actua es tambien por que piensan que es una perdida de tiempo y que no va a servir para nada.
me parece que las palabras indiferencia e indolencia se utilizan muy facilmente y no pienso que describan el comportamiento real de la sociedad colombiana, describe solamente el de indivuduos como los actores materiales e intelectuales de los crimenes y a algunas personas que estan expuestas a casos sea de violencia extrema o continua como las fuerzas armadas, fuera de algunos individuos antisociales, eso hace mucha gente pero sigue siendo una minoria. cuando estaba adolecente me toco ver varios crimenes y ver los muertos "calienticos" todos por arreglos de cuentas, entre ellos algunos por la mafia, lo peor era ver cuando llegaban las familias, todo eso fuera dela violencia que se vive en el pais en general y de la cual los colombianos somos victimas directas o indirectas, todo contribuyo para que yo creara esa coraza de la que hable antes pero NUNCA hizo y no hara de mi un indiferente o un indolente como a la mayoria y lo espero de los colombianos.
En cuanto España atrabilioso, pienso que no se pueden comparar las realidades de esta y Colombia.
jUAN dAVID

agosto 22, 2005 2:41 PM


El usuario anónimo dijo...
ATRABILIOSO:

La indiferencia e indolencia que caracteriza nuestra vida acual,es algo relativamente nuevo ;fijese,eramos un pais solidario,generoso,respetuoso,esplendido,de muy buenas maneras y hasta elegante al hablar,valdria la pena meditar y buscar las causas que poco a poco han deteriorado nuestro comportamiento respecto a los demas.

Chabacaneria,ordinariez y hasta vulgaridad en el trato diario con las personas,agiles para el insulto y muy parcos al reconocer los meritos ajenos, y como bien lo anota en su comentario, nada nos asombra,los mas horrendos crimenes los aceptamos con una mancedumbre borrega,timidos muy timidos al protestar ,demostrando el debido repudio,casi pareciera que aprobamos los atropellos, con tal de que no nos afecten directamente.

Escandalos monstruosos de corruptos politicos ,se olvidan tan facilmente que nos convierten mas bien en encubridores;asi de facil se la pongo.

Nos hemos convertido en pais ingobernable,precisamente por la falta de reaccion energica ante el crimen y el abuso ,estorbamos acciones contundentes,interponiendo como razon miedos ,impedimos cambios de estrategia con un radicalismo tan inflexible como inutil;le apostamos al fracaso.

Atrabilioso, ya esta bueno,propiciemos un cambio general de estrategias, permitamos que quien gobierne conduzca con toda libertad sus planteamientos,no sea que el resto del mundo sea quien se asombre,con sobrada razon ,de nuestra indolente indiferencia.

Simpliciano

agosto 22, 2005 3:59 PM


Atrabilioso dijo...
NOTA DE LA DIRECCIÓN A GMAR:
Ciertamente lo que usted manifiesta es una posibilidad, aunque yo veo la indiferencia desde asuntos menos relevantes que el terrorismo: si a usted lo atracan, en plena carrera 10, estará solo contra los ladrones, porque nadie se atreverá siquiera a gritar. Si usted vive, por ejemplo, en un conjunto y uno de sus vecinos maltrata a las aseadoras o al celador, no hay nadie que salga en defensa de los trabajadores. No nos vayamos tan lejos: desde el 99, los medios hicieron un pacto según el cual una masacre era de tres muertos en adelante: menos, sencillamente no merecía la aparición en televisión.
Ciertamente la ETA o ha mostrado la saña que han evidenciado los grupos narcoterroristas colombianos. Eso es indiscutible. Pero creo que uno de los principales frenos que tienen para no escalar las fechorías es la convicción de una reacción de la sociedad frente a sus ataques. Pero eso es especulativo y lo cierto está en los hechos que usted señala.
En cuanto a la canalización del descontento y la intención de aglutinar al país alrededor de una propuesta contra esos grupos delincuenciales, coincido con usted en que debemos utilizar los canales disponibles legal y constitucionalmente para manifestar nuestra inconformidad.
Gracias por sus comentarios.

agosto 22, 2005 4:14 PM


Atrabilioso dijo...
NOTA DE LA DIRECCIÓN A JAIME RUÍZ:
Quiero agradecerle la profundización que hace sobre el tema: las raíces de esa indiferencia que es uno de los frenos fundamentales que tenemos como nación. Como es obvio, yo lo veo más desde los hechos simples, como la insensibilidad de la que hemos sido víctimas varias generaciones a las que se nos adormeció la capacidad de maravillarnos. Usted va a temas más profundos y presenta elementos históricos que son importantes para evaluar el asunto. En lo único que difiero es en la caracterización del campesino como desconfiado, porque realmente mi experiencia ha sido otra: en muchos sitios de nuestra zona rural, que por fortuna tuve la oportunidad de recorrer con mis pies, siempre fui bien recibido y atendido como si fuera un viejo amigo de la familia. Incluso se abrían a temas políticos sin ningún pudor. Pero repito que es mi experiencia personal y la de algunas personas que conozco y que también han recorrido este país, ya sea como civiles o como representantes del Estado. Pero igual, usted puede tener información o vivencias diferentes.
Gracias por sus comentarios.

agosto 22, 2005 4:23 PM


Atrabilioso dijo...
NOTA DE LA DIRECCIÓN A REALISTA:
Cuando asesinaron a Álvaro Gómez yo estaba haciendo algunos trabajos para el noticiero 24 horas. En ese momento, cuando por ahí derecho se fue al cementerio el propósito de conformar la Unidad Investigativa de ese noticiero, escribí algo del dolor que me producía Colombia y recuerdo que reclamaba en ese momento que los colombianos seguíamos preguntándonos hasta cuando, en lugar de decir no más. Ahora ya estamos escuchando el no más, pero es importante la convicción que usted propone para construir país: no esperemos nada de nadie, pues somos nosotros los que tenemos que darle vuelta a la página. Adhiero a cada una de sus palabras.
Gracias por sus comentarios.

agosto 22, 2005 4:27 PM


Atrabilioso dijo...
NOTA DE LA DIRECCIÓN A JUAN DAVID:
Jaime Ruíz me volverá a corregir esta frase: "el problema no son las acciones de la gente mala, sino el silencio de la gente buena". La verdad no encuentro una frase que defina mejor lo que ocurre en nuestro país. Yo difiero de usted, porque en lo personal admito que ese adormecimiento si me hace indolente y que es necesario despertarlo: no es una indiferencia gratuita, ni condenable: es la consecuencia de muchas cosas y por lo tanto es necesario reflexionar el grado de indiferencia y modificarlo. El asunto aquí, mi estimado Juan David, es de despertar y hablar, expresar, gritar, opinar y compartir una visión de país.
En cuanto a España, tiene razón en el fondo y en la forma, pero creo que un factor importante que ha obstaculizado la evolución de la ETA es justamente la participación y el compromiso social.
Gracias por sus comentarios.

agosto 22, 2005 4:33 PM


Atrabilioso dijo...
NOTA DE LA DIRECCIÓN A SIMPLICIANO:
Estamos de acuerdo. Es más, usted en su comentario está describiendo y detallando lo que solo llamé un suicidio social: son la complicidad, el miedo, la coraza y el silencio los factores que nos pueden arrojar a un suicidio social. Pero no entro a explicarlo, porque usted lo ha hecho mejor que yo.
Gracias por sus comentarios.

agosto 22, 2005 4:36 PM


Foucault dijo...
La indiferencia tiene que ver con la saturacion por parte de los medios de comunicaciones, en 1 minunto se ven muertos/goles/modelos, supongo que el cerebro no es capaz de procesar las imagenes por separados y las etiqueta a todas como algo divertido o casual minimizando los asesinatos.

Las cadenas de television evitan mostrar imagenes con analisis para que no se den reflexiones sobre ello, es mejor mostrar los muertos como actores hollywoodenses que como personas reales con historias humanas. Un saludo

agosto 22, 2005 6:17 PM


Atrabilioso dijo...
NOTA DE LA DIRECCIÓN A FOUCAULT:
Aunque no se puede culpar del todo a los medios, ciertamente tienen una gran cuota de responsabilidad en el adormecimiento. Pero fíjese que en esto también podríamos encontrar un tema más profundo: la crisis de credibilidad en los medios: uno escucha que fueron dados de baja 10 guerrilleros, por ejemplo, y cuando muestran las imágenes hay tres cadáveres. A lo que voy es que el periodista no viene a este mundo a creer sino a comprobar y en eso hemos fallado todos. En este mismo sentido, el medio debe informar lo que le consta, contrastar la información con el material que él o ella ha recopilado como observador y hacer un balance para que el público decida: pero lo cierto es que lo primero que se dice es lo que queda y el televidente recuerda que escuchó hablar de 10 muertos y solo ve 3, lo que origina de inmediato la pregunta: ¿a quién le creo? Mientras busca la respuesta, comienza a pensar en el número y no en la tragedia humana que hay detrás de cada persona que pierde la vida. Pero esto es otro asunto que algún día analizaremos.
Gracias por su comentario.
PD: Dele una mirada a "La otra verdad", el link está en los recomendados, y luego me cuenta.

agosto 22, 2005 6:40 PM


Jaime Ruiz dijo...
Quiero comentar algunas afirmaciones de los demás participante. Por ejemplo, Dibolledo se plantea el hacer frente a esa indolencia como una cuestión de identidad. Cuando leí ese post encontré muy llamativo que se ponga "compatriotas" donde yo pondría "congéneres". Mientras que el civismo es débil en Colombia, el nacionalismo es muy fuerte, lo cual se puede ver con las fiebres del fútbol. Afortunadamente está orientado contra EE UU y no contra ningún vecino, porque siempre pueden pasar portentos como la Guerra de la Triple Alianza, en la que perecieron 90 por ciento de los varones paraguayos.

Más fuerte es lo que dice Juan David, cuyo talento para enlazar argumentos a veces produce la impresión de que le serviría para justificar cualquier cosa. A mí me parece que la "adaptación" llevaría a un mundo cada vez peor. Entonces se cae en la discusión entre evolucionismo y creacionismo: si el hombre se adapta a las cosas más horribles, ¿cómo es que nos bajamos de los árboles y construimos ciudades y representaciones que nos enorgullecen? La adaptabilidad a las condiciones atroces es una derrota del espíritu humano, y se ha visto y se ve, como en Alemania o Rusia hace 70 años o como en Cuba y Corea del Norte hoy. Pero siempre existe la esperanza de la "inadaptabilidad", de la resistencia de la gente a una degradación incesante. Para mí esa indiferencia es otra cosa, es "inadaptación": la seguridad jurídica de la democracia y la función del Estado como defensor de la vida son cosas demasiado nuevas, a las que Colombia todavía no se ha adaptado.

Siempre me llama la atención la forma en que la memoria construye una situación de origen buena y acogedora y ve el presente como una degradación respecto a lo anterior. Por eso es fácil imaginarse una Colombia agradable hace 40 años o en cualquier otra época. A mucha gente le pasa con su juventud, o con experiencias particularmente gratas. ¿Ustedes creen que realmente se vivía en Colombia mejor hace 40 años? Yo no lo creo. Y hace 80 años menos todavía. Violencia, arbitrariedad, injusticia y "corrupción" son rasgos de la sociedad tradicional. En la época de La vorágine todavía se perseguía a los indios en el Meta y la inseguridad en el campo era parecida a la de ahora, por no hablar de la intolerancia en las ciudades. Había muchísima menos gente, pero no era menos miserable ni menos violenta ni menos indolente. Puede que la tasa de homicidios fuera mucho más baja que la de 1990, pero esos picos no se alcanzaron por igual en todo el país, sino en el Occidente.

La clasificación de la gente en estratos de que habla Simpliciano es uno de esos rasgos odiosos de Colombia, pero no es una situación nueva. Yo creo que antes era peor, hace 200 años una parte de la población era cabalmente esclava, otra parte estaba cerca de esa condición y la mayoría estaba inscrita en castas según su origen étnico.

Si se piensa desde la luna, desde muy lejos, en un país que no tiene ninguna frontera acogedora con otros países, que está expuesto en la mayor parte de su territorio a temperaturas altas, que está rodeado de selva virgen por varios de sus costados, que tiene una mayoría de población rural y analfabeta que empieza a crecer a ritmo trepidante, multiplicando por más de diez la población de las principales ciudades en sólo 50 años y que tiene como dirigentes a individuos con profunda conciencia de esclavistas, todo el proceso de la Colombia moderna es menos misterioso de lo que nos figuramos.

Como será previsible la paulatina reducción de las tensiones y la mejora de las condiciones de vida. Puede que tarde una década o dos en ser evidente para todo el mundo, pero Colombia ya pasó con los gobiernos de Samper y Pastrana su momento agónico: hoy en día la mayor amenaza no son ni los narcotraficantes ni los guerrilleros sino el resto de Latinoamérica, que puede verse arrastrado a una guerra continental que ya está empezando en Bolivia.

agosto 22, 2005 7:38 PM


juan david dijo...
Jaime Ruiz en el primer post dije que el hombre se a adaptado a las condiciones y al medio que lo rodea o lo a adaptado para su provecho
en lo que ustes dice que antes no era era mejor que hoy estoy deacuerdo con usted por que uno siempre tiene tendencia a embellecer las cosas pasadas
juan david

agosto 23, 2005 6:17 AM


El usuario anónimo dijo...
Casi todos los colombianos que llegan de visita a EE UU, llegan diciendo lo mismo, emn Colombia estamos bien, pobres pero felices.

Y la inseguridad? No pues, bien mientras uno no salga de la cieudad todo bien, eso depende de donde se meta uno, eso si hay muertes y atracos pero todo bien...

agosto 23, 2005 8:53 AM


El usuario anónimo dijo...
Un punto para discutir acerca de la indiferencia: Acá los asalariados del país estamos literalmente asustados de perder nuestros empleos.

Muchos quisiéramos unirnos a las protestas que diariamente buscan llamar la atención de diferentes estamentos sobre cuestiones realmente fundamentales y ejercer nuestro derecho a la libre expresión pero hemos sido vítimas de forma sistemática de terrorismo psicológico (por decirlo de alguna forma) desde nuestros colegios hasta nuestras empresas.

En concreto, no podemos salir a protestar por un acto de violencia porque eso nos llevaría a perder nuestros empleos por abandono del sitio de trabajo. No podemos ni siquiera hacer uso del tiempo que concede el votar, de acuerdo con lo que dicen cuando entregan el certificado electoral. En ciudades como B/manga, no funciona nunca una feria o carnaval pues no podemos sumarnos a estas festividades. No podemos ni enfermarnos por cuanto es más el problema de abandonar el sitio de trabajo para pedir una cita prioritaria por una gripe que lo que nos tardamos comprando unos analgésicos. Si ud. es de los que solicita periódicamente citas para controles médicos u odontológicos ya se ha ganado la animadversión de compañeros y jefes.

Le garantizo que no somos indiferentes y que estos espacios de opinión vía web son de nuestros únicos escapes donde podemos mostrar que no somos indiferentes. Pero estas herramientas no le llegan al 85% de la población. Gracias.

agosto 24, 2005 5:14 PM


Atrabilioso dijo...
NOTA DE LA DIRECCIÓN A ANÓNIMO:
Usted plantea varias cosas interesantes para este debate. La primera, el tiempo para la manifestación. Permítame referirme nuevamente al tema Chingaza: la manifestación fue convocada en la noche, cuando se supone que no se enfrenta el deber laboral con el derecho de protesta: sin embargo, las avenidas, los buses y busetas estaban llenas, pero la manifestación no tenía más de 5 mil personas.
En cuanto a las elecciones, es muy grave el caso que usted denuncia y lo invito a dar el nombre o nombres de las empresas que violan ese derecho legítimo y fundamental de los ciudadanos: aquí le haremos seguimiento al asunto.
Gracias por sus comentarios.

agosto 24, 2005 5:23 PM


El usuario anónimo dijo...
por falta de elementos para poder tener un punto de partida en concreto en cuanto a lo del tema de las elecciones, me abstengo de momento de dar los nombres, solo comento que la incidencia es mayor en la empresa privada (podría apostar, el 99% de la empresa privada acá en B/manga). Pero esperemos a las próximas elecciones para poder hacer la denuncia con nombres propios y elementos probatorios, agradezco su interés y me comprometo a ello. Gracias nuevamente.

agosto 24, 2005 5:43 PM